Este un pequeño espacio que busca ser una herramienta alternativa para la autonomía (auto-educación y auto-aprendizaje) tanto en el espíritu individual, como colectivo; y a si fomentar el pensamiento crítico, creativo, rebelde y libertario. También impulsa una ética horizontal, es decir, entre iguales; la racionalización de individuos (Pensamiento por sí mismo, pensamiento en el lugar del otro y ser consecuente) igualmente esto va contra toda discriminación y promueve la creación de cultura.

martes, 17 de mayo de 2011

Reflexiones en torno a la sociedad disciplinaria.

Reflexiones en torno a la sociedad disciplinaria. 
(Juan Manuel Silva)


La psicología educacional hoy en día se aboca principalmente a apoyar los procesos educativos tales como enseñanza y aprendizaje, como también estudia las variables que los afectan, desde el ambiente educacional, hasta el entorno familiar y social. Además el psicólogo educacional es uno de los principales influyentes en la construcción de los objetivos de la educación, y con esto uno de los principales influyentes en la construcción y mantención de cierto tipo de sociedad, adquiriendo una importancia no menor en el funcionamiento de la vida social, tomando parte en la mantención o en el cambio de las relaciones sociales, ya que el aprendizaje no solo conlleva la adquisición de conocimientos, sino más bien, es consustancial al desarrollo humano, siendo parte importante de la formación de los individuos.



Una vez asumida ésta concepción y punto de vista sobre la psicología educacional, en este ensayo nos introduciremos en el análisis de cómo técnicas psicológicas son utilizadas para perpetuar el poder a partir de las instituciones educacionales en base a técnicas nacidas para vigilar y normar, y cómo hacen que el mismo individuo sea su propio vigilante, para luego dar paso a la revisión de algunas teorías alternativas, que se contraponen tajantemente a la función y forma de la educación como hoy se plantea, entendiendo que desde el momento en que se cambia la razón de la educación se puede abrir paso a cambios cualitativos. Cambios que se hacen imprescindibles en una sociedad manipulada al antojo de unos pocos, y donde (con respecto a la educación) se debe dar un amplio debate epistémico sobre el cómo y por qué de la educación, dejando claro que si se quiere una sociedad de alienados y explotados, se esta yendo por el camino correcto, no así si se pretende dar a la educación un papel emancipatorio, que por cierto se torna necesario para la realización del individuo en su plenitud.


Para Foucault, las ciencias humanas nacen en la matriz de la sociedad disciplinaria, en la cual se busca tener bajo control a los individuos, basada en la teoría de Jeremy Bentham sobre el panóptico, la cual habla de una torre de vigilancia, ubicada en el medio de un recinto circular, con un vigilante en la cima, el que tiene acceso visual para mantener vigilados a los distintos individuos que se encuentran en las celdas de barrotes ubicadas en las orillas del recinto, mostrando que si un día el vigilante no está, los individuos al no saber de su ausencia, se siguen sintiendo constantemente vigilados. Lo anterior llevado al plano de la educación se traduce en una vigilancia constante, que busca internalizar la vigilancia y los dispositivos de control en la mente de los estudiantes para formarlos como individuos domesticados, lo que busca más allá de brindarle conocimientos al estudiante, es mantenerlo en la disciplina social autoimpuesta que se da por la internalización de los valores a través del panóptico, que presupone (para tener un fundamento de vigilar) debe haber una normalidad.


El hecho de normar da por asumida la idea de que debe haber normales y anormales, pero ¿hasta qué punto podemos decidir cual es cual?, la idea de normar se muestra más bien como otra arma de las elites de individuos interesados en mantener alienados a los demás, y que necesita de alguna manera aplastar la creatividad para mantener a la población en el conformismo que se vive, afirmación que se vera apoyada, quizás un poco ingenuamente, pero no menos acertada, por Sternberg y Lubart1 al plantear que “la importancia de la creatividad está menospreciada tanto por parte de la sociedad, en general, como por parte de las instituciones especiales que existen dentro de la sociedad, como son las escuelas”, (Sternberg y Lubart, 1997, Pág.35).


Las maneras que se han encontrado para internalizar la obediencia basadas en la teoría del panóptico con múltiples, pero una de las que más efectividad se encuentra es la creación del edificio de control en la escuela, es decir, levantar colegios en infraestructuras que permitan observar todo con una simple barrida de la mirada, dando un control visual del edificio, “Desarróllase entonces toda una problemática: la de una arquitectura que ya no está hecha simplemente para ser vistas, o para vigilar el espacio exterior, sino para permitir un control interior articulado y detallado…”, (Foucault, M., 1989, Pág. 177), así poder contar con un instrumento de formación en masa. También encontramos la reglamentación como otra forma eficaz de internalizar los valores de disciplina, y el control de tipo jerárquico, que imposibilita que desde los mismos funcionarios surjan ideas que fomenten los cambios y la creatividad, porque como podemos ver, “muchos educadores se encuentran limitados por directrices impuestas que no tienen la necesaria flexibilidad para fomentar la creatividad.”, (Sternberg y Lubart, 1997, Pág. 37). Sentirse vigilado todo el tiempo, logra que se garantice el funcionamiento automático del poder, esto, porque al internalizarse la vigilancia y los valores para crear individuos disciplinados, el individuo pasa a perder su propia consciencia, para pasar a estar dormido socialmente, lo que no le permite caer en la cuenta de su realidad como individuo, y queda imposibilitado de reaccionar, es decir, el individuo pasa a estar en un estado de alienación2.
La manera de salir de ésta domesticación es fomentando la creatividad, la cual se encuentra en total contraposición de la alienación, en la medida de que la creatividad es consecuencia de un entorno en el que el individuo es consciente de la realidad y juega con ella.


Ante esta dicotomía alienación/creatividad, es que se han planteado formas alternativas de educación que buscan devolverle al individuo su calidad de persona, alentando maneras de que el individuo tome
parte activa en la construcción del conocimiento y la su propia formación como persona.
Una de las principales contraposiciones a la educación de la sociedad disciplinaria y que ha logrado instaurarse en los debates es el constructivismo, nacido de las ideas de Jean Piaget, donde se ve el aprendizaje como un proceso en el cual el estudiante toma parte activa en la creación de nuevas ideas y conceptos basados en conocimientos presentes o pasados. El constructivismo no es un método de enseñanza, sino que, más bien, es una explicación desde un paradigma distinto que el de la escuela de hoy sobre cómo se construye conocimiento, rescatando la libertad, la auto regulación y la interacción con el ambiente en la creación de un conocimiento.


Una teoría sobre enseñanza que rescata muchos de los planteamientos del constructivismo es la teoría sobre la educación libertaria3, que ha contado con bastos experimentos, entre los cuales consta la observación de niños jugando para luego ofrecerles potenciar ciertas habilidades percibidas, o también, el caso más emblemático que se registra hasta ahora en educación libertaria, es el de la escuela de Summerhill, ubicada en Inglaterra, la cual buscaba educar personas libres, dándole la oportunidad a los niños y jóvenes de asistir a clases voluntariamente. Summerhill fue fundada 1921 por Alexander S.Neill, quien fue inspirado al conocer Little Commonwealth, donde vio como los mismos jóvenes presos por cometer delitos gestionaban el espacio. Neill planteo Summerhill como una escuela auxiliar que ayudara a los estudiantes a fomentar aquellas habilidades y aptitudes que ellos mismos querían desarrollar, en vista de la formación que cada cual este buscando. Otro dato curios de esta escuela, es que ningún adulto vale más que un niño.


En base a lo expresado en este ensayo, podemos, ahora, ver como las sociedades y sus modelos de funcionamiento dependen de la educación para perpetuarse en el tiempo, la utilizan para mantener dormida a la gente y como se plantean soluciones alternativas para combatir la alienación de la gente provocada por una sociedad sumamente disciplinaria desde los primeros años de la infancia, y se puede ver que el papel de el psicólogo educacional es sumamente importante y detenta una gran responsabilidad a la hora de ser un individuo que no reflexione y se limite solo a reproducir un sistema basado en la deshumanización del ser humano, o lo que queda de él.


1 Autores de “La creatividad en una cultura conformista”. Profesores del doctorado en psicología en la universidad de Yale.

2 Blanca Muñoz cita textualmente a Adorno refiriéndose a alienación como “Es la enajenación de la autoconsciencia”, (Muñoz, B., 2000, Pág. 52).

3 Teoría desarrollada principalmente por Francisco Ferrer Guardia, militante anarquista español que profesaba una educación antiautoritaria a la cual todos tuvieran derecho.


No hay comentarios:

Publicar un comentario